Un proyecto de ley que tiene la intención de combatir la venta de productos robados en San Francisco, California, fue anunciado el lunes 3 de junio ante los medios de comunicación. La iniciativa es impulsada por la alcaldesa London Breed y el senador Scott Wiener.
Es importante recordar que, desde octubre de 2023, en esta ciudad ya se había emitido una moratoria que prohíbe que los vendedores ambulantes se instalaran en distintas áreas. Según los legisladores, esto fue con la intención de reforzar la seguridad y mantener limpias las calles.
La propuesta de ley SB-925 establece que los vendedores ambulantes deberán tener un permiso para comercializar mercancía dentro de un listado específico. Además, quienes sean descubiertos comercializando productos robados serían acreedores a multas y la incurrencia en ello podría derivar hasta en una sanción de seis meses de cárcel.
“La SB-925 permite una intervención policial limitada contra personas que venden productos comúnmente robados sin permiso. Cuenta con el apoyo de una coalición de organizaciones comunitarias”, declaró el senador Wiener a través de su cuenta oficial de X.
“San Francisco tiene una increíble cultura de venta ambulante que apoya a las familias y hace contribuciones irremplazables al rico tapiz cultural de nuestra ciudad. Pero los malos actores que venden bienes robados han expulsado cada vez más a estos vendedores legítimos con desorden e incluso violencia”, agregó Wiener.
Naturalmente, parte del objetivo de la iniciativa es redoblar los esfuerzos para reducir los crímenes de robo en tiendas minoristas.
No obstante, es necesario informar que las sanciones sugeridas en este proyecto de ley no se aplicarían a los vendedores ambulantes que ya comercializan sus productos con permiso, venden alimentos preparados u ofrecen artículos incluidos en la lista aprobada por las autoridades de San Francisco.